[Biblioblog] En el mundo de la moda, cuando alguien se adelanta a su tiempo y marca tendencias es cool y está a la última, lo que contribuye a su prestigio social. Incluso existe la valiosa profesión del cazador de tendencias, cuya labor es la de identificar lo que todo el mundo querrá ponerse en la próxima temporada, de manera que las empresas puedan llenar sus escaparates a tiempo.
En el mundo de la tecnología sucede más bien al contrario: los primeros en emplear las últimas novedades son considerados freaks (monstruos en inglés, nada menos), frikis, término que se asocia a personas marginadas, poco integradas en la sociedad. Sin embargo, esos frikis son realmente adelantados a su tiempo, early adopters, prueban antes que nadie productos o servicios y realmente deciden lo que vale y lo que no. Así, realmente se puede decir que marcan tendencias. Sin embargo, es paradójico cómo el mismo fenómeno es percibido en unas áreas u otras de forma completamente opuesta.
Pero de la misma manera que en el mundo de la moda hubo un cierto conservadurismo en su día (hoy no tan bien visto, quizás por el imperativo del mercado de renovar el vestuario cada temporada), posiblemente la percepción cambiará con respecto a la tecnología, y lo que ayer fue percibido de forma despectiva mañana puede ser la tónica general. Eso sí: evitemos ser modernos por el mero hecho de serlo.
En publicaciones profesionales y encuentros del ámbito de la Biblioteconomía se habla de prospectiva, que en palabras de la RAE es el conjunto de análisis y estudios realizados con el fin de explorar o de predecir el futuro en una determinada materia. En un mundo, el de la información, en el que todo cambia rápidamente, adelantarse y ser los primeros en saber (y marcar) por dónde irán los tiros supone un riesgo, pero también una ventaja, y contribuye a que los usuarios perciban nuestros servicios como más modernos y adecuados a nuestro tiempo. Así, seamos un poco frikis. Descartemos los tópicos como que las personas que emplean internet son más introvertidas (recomiendo para el ejercicio la lectura del artículo de Tomàs Baiget en el último número de El Profesional de la Información) o que la tecnología deshumaniza, que sólo denotan miedo a lo desconocido y nos dejan indefensos ante las demandas de los usuarios. Tomemos diariamente una píldora de información o, simplemente, intentemos pensar como lo haría otro.
Pingback: Tweets that mention Las bibliotecas necesitan frikis « Biblioblog, 3a edición -- Topsy.com
Pues ya me gustaría a mi ser «FRIKI» en este mundo de las bibliotecas o por lo menos la décima parte de friki de los tres tenores que lleva este blog, mejor me luciría el pelo. Seguir así. Un saludo
P.D. Esto lo iba a poner en un codigo bidi pero creo que no me deja. 🙂
Precisamente hoy hablabamos de esto en una reunión en la biblioteca… después de llevar 3 años con el blog he tenido que reconocer que soy un poco friki…. vaya!!! voy a convencerme de que es bueno jajajaja GRACIASSSSSSSS 😉
Buen post!. Hace tiempo que ser friki o nerdo es una tendencia absolutamente mainstream.
http://www.elpais.com/articulo/portada/2010/venganza/novatos/elpepisupep3/20101231elptenpor_3/Tes
http://www.bne.es/webapp/verPostBlog.htm?idPost=61&urlCms=/es/ComunidadBNE/Blogs/index.html
Saludos
Pingback: Quora