Los medios sociales están dando los primeros pasos para convertirse en canales de venta directa, además de las plataformas de marketing que son ahora. Facebook, Twitter, Pinterest y otros medios están trabajando en botones de compra que permitirán a sus usuarios adquirir productos sin salir de sus dominios. Esta podría ser una interesante vía de financiación, uno de sus principales retos a ls que se han enfrentado.
Hace casi un año Facebook anunció su botón de compra, que apenas ha dado novedades desde entonces. Pinterest ha anunciado este mismo mes los buyable pins —pines susceptibles de compra—, que funcionarán próximamente en las aplicaciones para iPhone y iPad en Estados Unidos. Para hacer posible la venta Pinterest y Facebook colaboran con Shopify, una plataforma de comercio electrónico.
En Facebook y Pinterest los botones de compra se asocian a cada publicación y Twitter comenzó con esta misma idea, pero recientemente ha apostado también por unas páginas especiales para cada producto, sobre el cual se recopilarían una selección de tuits. La editorial Penguin Random House ha sido uno de los primeros aliados de Twitter en esta aventura y ya es posible adquirir algunos de sus títulos directamente desde esta plataforma.

Página de compra en Twitter para el libro The Martian.
Esta no es la única novedad en Twitter. Como parte del proceso de compra utiliza las colecciones, que realmente son páginas en las cuales una persona o empresa influyente selecciona y recomienda varios productos a la venta. Cada uno de esos tuits con productos enlaza con una página de compra desde la que adquirirlos. Parece complicado, pero no lo es: con estas colecciones Twitter está promocionando la compra de determinados ítems a través de la prescripción. Para hacernos una idea, una de las primeras colecciones contiene productos seleccionados para los fans de Juego de Tronos por la cadena de televisión HBO. Y Penguin Random House también tiene su propia colección.
Hasta el momento los botones de compra están en modo beta y solo disponibles para unas pocas empresas, pero se espera que se más adelante otras tengan esta misma oportunidad.
La compra es solo una parte de la dirección que están tomando los medios sociales, que comienzan a introducir otros tipos de llamadas a la acción que no implican necesariamente un intercambio monetario. Así, las páginas de Twitter también dirigen a lugares y Facebook incluyó en su día las llamadas a la acción en sus páginas, que por ahora solo permiten comprar, reservar, jugar, registrarse, usar aplicación y ver un vídeo. Este podría ser el primer paso hacia otro tipo de acciones, aunque sin duda la compra es la más interesante en términos económicos.
¿Por qué hablamos sobre esto en un blog sobre bibliotecas? Si las bibliotecas son lugares, también podrían tener su propia página en Twitter, como los restaurantes que recomienda The Infatuation en su página —sirva de ejemplo este local en Brooklyn—. Por otra parte, la posibilidad de ampliar las llamadas a la acción más allá de la compra podría conducir a otras acciones, como tomar prestado un libro electrónico.La prescripción es una de las tareas que los bibliotecarios y quienes trabajan en el fomento de la lectura venimos llevando a cabo desde hace tiempo. Finalmente, las bibliotecas están utilizado desde hace tiempo los medios sociales como vías de comunicación y de promoción de sus servicios. Aten cabos e imaginen cómo podrían ser las cosas en este nuevo escenario, en eso consiste la innovación.